Alvise Ranieri Tenti (n. 1962, Milán), desde muy pequeño estuvo rodeado de arte, lo que le obligó inconscientemente a ver la belleza en todo, no sólo por obra de su padre, conocido restaurador y experto en arte, de su abuelo materno, importante coleccionista, y de su primo, uno de los decoradores más prestigiosos del mundo, sino por el contexto único en el que tuvo la oportunidad de crecer y desarrollar su gusto.

Tras licenciarse en Economía y Comercio, se dedica profesionalmente al turismo y comienza un camino que le llevará a viajar mucho, pero sobre todo a profundizar en el conocimiento de lugares que le involucran emocionalmente.

A mediados de los años 90 decidió instalarse en África Oriental, el lugar que por aquel entonces se sentía más como en casa. Empezó entonces a viajar por todo el mundo con la misión de descubrir nuevas culturas y nuevos paisajes capturando cada momento con el arma más certera: la fotografía.